En vísperas de los primeros ensayos, expertos alertan sobre los riesgos de poner en circulación vehículos sin chofer. “Están haciendo esencialmente conejillos de indias de los pasajeros”, consideró un defensor de la protección al consumidor.
La decisión de Uber de poner a prueba coches
autónomos -que prescinden de la conducción humana- en las calles de Pittsburgh,
en Estados Unidos, encendió las alarmas de expertos que consideran que la
tecnología no está lista todavía para ese uso.
El experimento se iniciará esta semana, según el
diario The Washington Post, pese a que esa localidad de Pennsylvania no cuenta
todavía con leyes para controlar el uso de la tecnología para coches autónomos
o establecer reglas en caso de que un accidente sucediera.
Investigadores señalan que los vehículos autónomos
fueron arrojados de puentes -entre otros desafíos que se presentan al software-
un tema que no es menor en una ciudad como Pittsburgh que tiene más puentes que
cualquier otra ciudad importante de Estados Unidos.
"Ellos están haciendo esencialmente conejillos
de indias de los pasajeros", dijo Joan Claybrook, un defensor de la
protección del consumidor y el ex director de la Administración Nacional de
Seguridad Vial. "Por supuesto que va a haber accidentes. Se pueden hacer
exactamente las mismas pruebas sin tener el ciudadano medio en su coche",
agregó.
Por su lado, los defensores de los vehículos
autónomos dicen que la tecnología tal vez no existiría si fuera necesario
esperar a que los gobiernos aprueben normas. Con cerca de 37.000
estadounidenses que mueren en accidentes automovilísticos cada año, en gran
parte debido a errores humanos, los técnicos hicieron hincapié en la necesidad
urgente de poner a prueba coches sin conductor en la vía pública.
"Hemos visto que esto está llegando, más
rápido de lo que se podía imaginar", dijo Roger Cohen, del Departamento de
Transporte de Pennsylvania. El ejecutivo señaló que Uber no tiene la obligación
legal de pedir permiso antes de su lanzamiento. "La ley actual, por su
silencio, permite lo que no prohíbe".
El proyecto de Uber en Pittsburgh no es únicamente
un ensayo de máximo riesgo de una tecnología prometedora y naciente. Es también
una muestra de la creencia inscrita en el ADN de Silicon Valley y, según la
cual, la innovación está siempre por delante de las reglas, y en el que el mundo
es un laboratorio en el que la vida se puede mejorar cuando los innovadores
gozan de la libertad para experimentar.
Fuente: http://www.infobae.com/america/tecno/2016/09/12/uber-estados-unidos-inicia-las-pruebas-de-coches-autonomos-en-las-calles-de-pittsburgh/