RSE - Se lanzó una guía de diversidad sexual con material legal y administrativo para minimizar riesgos y demandas. Además, propone acciones para la integración del colectivo LGBTI. Los casos de compañías con prácticas inclusivas.
De a poco las
empresas en la Argentina comienzan a trabajar sobre la diversidad sexual y hay
algunas que ya están haciendo prácticas de integración. "La diversidad
está en todas partes, si ya está instalada en una empresa es necesario
trabajarla", sentencia María José Sucarrat, directora ejecutiva de la
R.E.D. (Red de Empresas por la Diversidad), de la Universidad Di Tella, que
lanzó una guía sobre inclusión para empresas. El material propone un marco de
DD.HH., legal y normativo en relación con la temática para minimizar riesgos y
demandas, y además plantea una serie de procesos y buenas prácticas que las
empresas pueden llevar a cabo para generar una cultura organizacional abierta y
respetuosa con personas del colectivo LGBTI. Según una pequeña muestra, de 33
empresas consultadas 10 trabajan el tema y sólo dos lo hacían desde antes de
2012, "en los últimos dos años no ha evolucionado en la temática",
analiza Sucarrat. "Lo importante es que las empresas abran un espacio para
que la gente se despliegue", sostiene la cofundadora de R.E.D y advierte
que hay "muchas que están trabajando y otras que no, pero sabían que
estaban en deuda".
"La guía
busca generar espacios inclusivos", explica el psicólogo Adrian Barreiro,
quien colaboró en la redacción del documento y considera que primero hay que
poner el tema sobre la mesa y "empezar a tomar conciencia de las personas
LGBTI que están en las empresas". Según el especialista no hablar de la
temática en las empresas "invisibiliza formas de discriminación que están
naturalizadas e internalizadas en el trato cotidiano".
La propuesta
general es que los colaboradores se muestren tal cual son y pueden hacer uso de
sus derechos. Los especialistas consultados aseguran que por vergüenza o miedo
muchos empleados ocultan su orientación sexual y a la hora de casarse, por
caso, en lugar de pedir una licencia de matrimonio, recurren a los días de
vacaciones. "Esto ocurre porque en ambientes laborales no se promueve
abiertamente la inclusión de la diversidad sexual", lanza Barreiro.
También
denuncian que hay situaciones de discriminación, quizás más con las personas
trans que hacen su transición de género durante su vida laboral. "Se ha
llegado a plantear que pueda usar el baño correspondiente con el género
autopercibido recién cuando tenga el nuevo DNI", comenta Barrreiro y lo
adjudica a un error de gestión que finalmente se traduce en un acto de
discriminación. Ante la pregunta sobre si dividir a los trabajadores en grupos
de afinidad es segregarlos, Sucarrat respondió por la negativa y explicó que el
trabajo en red "sirve para que las personas que tienen las mismas circunstancias
puedan reunirse, aprender del otro y elaborar propuestas a la organización para
que realmente haya una escucha activa".
Aunque pocas,
hay empresas que realizan prácticas de diversidad sexual que sirven para marcar
precedentes. En Accenture hay "baños neutros" que son baños
individuales, sin genero específico que buscan romper con el binomio masculino
y femenino y así educar a los empleados en el respeto de la comunidad LGBTI.
Dow Argentina promovió un foro sobre diversidad sexual en el ámbito laboral, en
General Electric se realizan talleres de sensibilización en donde a través del
casos prácticos buscan desafiar paradigmas e indagar posibles caminos ante
problemas de discriminación. Además esta empresa anunció que en 2017 lanzarán
un programa para promover el ingreso de trabajadoras trans.
Por último, el
Grupo Telecom lleva adelante un programa en donde desarrollan políticas activas
a favor de la diversidad y la inclusión. En esa línea, se desarrolló un manual
de procedimiento operativo para la garantía del derecho de la identidad de
género que establece pautas y responsabilidades que tiene la empresa para con
sus empleados del colectivo.
Fuente: http://www.ambito.com/863401-como-potenciar-la-diversidad-sexual-en-las-empresas