Julio Francisco Herrera, es un joven profesional de
Concepción que supo mixturar su pasión por el rugby con el mundo del derecho.
Tras 12 años de práctica deportiva en el club de sus amores, Huirapuca, Julio
conoció las mieles del éxito disputando torneos como el Nacional de Clubes,
entre otras competencias.
Con disciplina, se puede ser deportista y profesional
"Mientras estudiaba, dedicaba los tiempos de descanso a los entrenamientos.
Cada lunes íbamos a las concentraciones en la Capital en un club ubicado en el
Parque 9 de Julio. A las 19 horas salíamos en Tráfic rumbo a la Capital para
estar en los entrenamientos que comenzaban a las 21 horas. Regresábamos a casa
a las 00:30. Cada viernes por la siesta, entrenábamos en Concepción y, los
fines de semana, jugábamos”, expresó a Abogados Tucumán.
Una vez que se recibió de abogado, todo se hizo más simple. “Pude
ordenar mis horarios como quería. En mi etapa de estudiante, siempre traté de
que no coincidan mis horarios de cursado con los de entrenamiento. En rugby, si
no sos constante, te bajan y quedás suplente”, dijo.
Herrera expresó que el deporte le sirvió a organizarse y
saber cómo aprovechar el tiempo libre. Aprendió, además, a ser constante en sus
aficiones: “sabía que tenía que hacer un gran sacrificio para llegar a
recibirme y no dejar de jugar, que era lo que más me gustaba”.
Remarcó que el deporte de la ovalada abre muchas puertas. “Hice
numerosos contactos y amigos que hasta el día de hoy sigo viendo. Es un deporte
muy solidario en todo sentido. Todos, desinteresadamente, colaboran ante
cualquier situación, seas o no del mismo club”.
Contó que es frecuente encontrar a colegas que vienen del
mundo del rugby en los tribunales. “Al margen de ser un deporte de contacto,
donde es común los roces fuertes durante los partidos, nunca se pierde el
respeto. Te tomas un café cerca de tribunales o bien una cerveza por la
noche... en todos los juzgados o fiscalías siempre hay algún ex rugbistas o
alguno que esté jugando. El rugby en Tucumán se vive como una familia”,
finalizó.
Fuente: Abogados Tucumán