La
Justicia Federal determinó que la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA
deberá indemnizar con $47.000 a una estudiante a la que se le cayó parte de la
mampostería del hall de entrada de la facultad. El fallo sostuvo que “existe un
deber de seguridad de resultado con los estudiantes”.
Una estudiante de la Facultad de Ciencias
Económicas de la Universidad de Buenos Aires deberá ser indemnizada por esa
casa de estudios por un accidente que sufrió mientras ingresaba al edificio de
la facultad, cuando cayó “sobre su cabeza, cuello y hombro izquierdo parte de
la mampostería del cielorraso del techo del hall de entrada”.
La
Sala II de la Cámara Civil y Comercial Federal confirmó la condena que le
atribuyó responsabilidad y además elevó el monto indemnizatorio que se fijó en
Primera Instancia de los autos “Bustamante, Pamela Eugenia c/ Facultad de
Ciencias Económicas y Otro s/ Daños y Perjuicios”.
En un
fallo que contó con las firmas de los jueces Ricardo Guarinoni, Graciela Medina
y Alfredo Gusman, la Cámara ratificó el criterio de Primera Instancia que tuvo
por acreditado “que se produjo un desprendimiento de mampostería en el hall
frente a la escalera principal, resultando herida una alumna”.
El
Tribunal de alzada también coincidió con las consideraciones respecto de que
que se encontraba demostrado en la causa “el nexo existente entre las partes,
tratándose de una relación de naturaleza contractual”, y por ende la
responsabilidad de la Facultad, que se fundaba “en la presencia de un vínculo
jurídico preexistente entre las partes, en el que existe un deber de seguridad
de resultado con los estudiantes”.
“En
este sentido, no habiéndose invocado causa ajena alguna en la producción del
daño y encontrándose admitida la existencia del hecho dañoso, hizo lugar a la
demanda. En función de ello, dispuso el pago de la indemnización por
incapacidad sobreviniente, daño emergente, el daño moral y tratamiento
psicológico”, indicó la sentencia, que en primer término fijó la indemnización
en $29.500.
La
Cámara consideró exiguos los montos fijados. Para arribar a esa conclusión, los
jueces tuvieron en consideración que la accionante tenía 26 años al momento del
hecho, que era estudiante de la carrera de Contador Público, y que las pericias
determinaron que la accionante tenía un 15% der incapacidad física y un 23,5%
de incapacidad laboral.
Sumado
a ello, el médico especialista en el caso sostuvo en su informe que “existe un
vínculo de causalidad del accidente de autos con las secuelas del cuadro
postraumático de cuello comprobada con lo manifestado en el libelo de demanda”.
Los jueces decidieron entonces modificar la condena y elevar el “quantum” en
concepto de incapacidad sobreviniente, el que se fijó en $47.000.
Fuente: http://www.diariojudicial.com/nota/74229/civil-y-comercial/se-le-cayo-la-facultad-encima.html