El abogado Bernardo Lobo Bugeau realizó una reseña histórica de Bernardo José De Monteagudo: 

Bernardo José De Monteagudo, nació en Tucumán el 20/8/1789 y fue víctima de homicidio premeditado el 28/1/1825 en Lima. Para graduarse de abogado presentó tesis en la Universidad de Chuquisaca (hoy Bolivia) sobre "el origen de la sociedad y sus medios de mantenimiento". Ejerció por corto tiempo como Defensor de pobres. En su rutilante carrera política fue hombre de confianza del Libertador José de San Martín, y su Ministro en el Protectorado del Perú. Creó el silogismo de Chuquisaca que contribuyó encender la llama revolucionaria en el continente sudamericano. Éste expresaba: "debe seguirse la suerte de España o resistir en América. Las Indias son un dominio personal del rey de España, el rey está impedido de reinar, luego Las Indias deben gobernarse a sí mismas".

Sus tesis son un aporte a la génesis en el continente sudamericano del principio de Soberanía de los Pueblos que había comenzado instalarse en la ciencia del derecho, y propia del derecho internacional, un siglo antes en Europa por invención del jurista holandés Hugo Grocio, de secularizacion del derecho y creación del Derecho de Gentes.

Monteagudo fue también escritor y militar, donde a pesar de no tener formación en armas obtuvo el grado de coronel del ejército del general San Martín. Muere violentamente a los 35 años. Su ejecución fue un crimen político que retardó y desdibujó  la emancipación de las nacientes naciones de la Sudamérica, ya que se le había encomendado la misión de organizar el Congreso Afictiónico de Panamá y dar nacimiento a la gran nación de los Estados Unidos de la Sud América. Ese día es ejecutado, en la plazoleta de La Micheo en Lima, clavándole un puñal en el corazón por dos sicarios. Bernardo venía de su casa e iba a la de Juana Salguero. Candelario Espinoza y Ramón Moreira fueron condenados por el hecho a 10 -conmutada luego de sentenciar la pena capital-- y 6 años, respectivamente. Nunca  pudo determinarse las autorías intelectuales, aunque recientes  investigaciones dan crédito a la versión que la decisión de ejecutarlo, utilizando como señuelo a la Salguero, fue acordada en una logia masónica (Republicana). El Dr. Monteagudo había pertenecido a otra formación masónica: la logia Lautaro. Desde el año 2016 sus restos descansan en el cementerio del Oeste en San M. de Tucumán.