El juez Pérez (N°4) afirmó que el ex titular de la
Fiscalía N°2 debe ser juzgado por la presunta comisión de delitos durante los
siete años en los que controló la investigación del crimen de Paulina.
A menos que una eventual apelación prospere, Carlos
Albaca será juzgado por los presuntos delitos que perpetró mientras debía
investigar el homicidio impune de Paulina Lebbos. La decisión de someter a
juicio a un ex miembro del Ministerio Público fue adoptada por Víctor Manuel
Pérez, juez de Instrucción N°4, el viernes pasado. Ese magistrado imputó al ex
fiscal N°2 la posible comisión de los delitos de incumplimiento del deber de
promover la represión en 10 oportunidades y de encubrimiento agravado respecto
de sus actos en “Lebbos”, caso que controló entre el 20 de abril de 2006 y el 5
de junio de 2013. El juzgamiento era reclamado por Alberto Lebbos, padre de la
víctima, a quien Albaca impidió todo acceso al expediente.
La resolución del juez Pérez acoge el requerimiento
de elevación a juicio que había formulado Juana Prieto de Sólimo, fiscala de
Cámara N°3. Y rechaza los planteos de recusación y nulidad; la oposición al
pedido de Prieto de Sólimo y la solicitud de sobreseimiento que había deducido
el defensor Manuel Pedernera. “Esta causa tiene origen en la Acordada 412/2014
de la Corte Suprema de Justicia de Tucumán, donde, por el voto de la mayoría
(Antonio Gandur, René Goane y Antonio Estofán), requiere el inicio de la
investigación jurisdiccional para determinar la responsabilidad de Albaca”,
recordó el magistrado (José Cano, entonces diputado nacional de la UCR, también
había radicado una denuncia). En ese momento, Albaca todavía era titular de la
Fiscalía N°2 de esta capital, pero ya había presentado la renuncia que le
permitió jubilarse con el beneficio del 82% móvil el 31 de julio de 2014. Junto
con él y también alcanzado por las críticas por el manejo del caso “Lebbos”, se
jubiló con el mismo régimen Luis De Mitri, ex jefe de los fiscales y defensores
oficiales.
Pérez manifestó que la Acordada 412/14 era
consecuencia del sumario administrativo abierto por la Corte y cuya instrucción
estuvo en manos de Marta Jerez de Rivadeneira, fiscala de Cámara N°2. Esta
investigación interna se remonta, a su vez, al informe crítico que elaboró
Bernardo Lobo Bugeau en su carácter de abogado de la Secretaría de Derechos
Humanos de la Nación. Gracias a la intervención de Lobo Bugeau, Albaca fue
sustituido por el fiscal Diego López Ávila (N°4) y Alberto Lebbos pudo por fin
tomar contacto con el expediente que tramitaba en secreto en la Fiscalía N°2.
El juez relató el desarrollo de la investigación de
Prieto de Sólimo, que contrastó con López Ávila las deficiencias señaladas por
la Corte y advertidas en el expediente principal. El 19 de noviembre, el ex
fiscal N°2 regresó a los Tribunales para declarar como imputado.
Pérez consideró que el trabajo de Prieto de Sólimo
estaba ajustado a derecho. Esta fiscala cuestionó 11 acciones y omisiones de
Albaca. Entre ellos, describió pruebas técnicas y estudios científicos que no
habrían sido practicados; sospechosos que no habrían sido indagados y pistas
que habrían sido dejadas de lado. Respecto de la imputación de encubrimiento,
Prieto de Sólimo dijo que Albaca “a sabiendas y conscientemente no había
realizado durante siete años los estudios de ADN” de los cabellos encontrados
en el cuerpo de Paulina y que esto habría coadyuvado a la pérdida de material
importante para detectar perfiles genéticos. Pese a que durante el sumario
Albaca puso en duda que Paulina haya sido asesinada y se refirió a su
intrepidez sexual, ayer prefirió guardar silencio. El defensor Pedernera
anticipó que apelará la resolución de Pérez.
El fracaso de la prueba de ADN fue determinante
para el sobreseimiento de Gabriel Alperovich, hijo del ex gobernador José
Alperovich, y de Sergio Kaleñuk, hijo de Juan Alberto Kaleñuk, quien fue
secretario privado del mandatario mencionado y falleció en enero. La semana
pasada y en paralelo al caso “Albaca”, Carlos Sale, fiscal subrogante ante la
Cámara de Apelaciones, terminó de desvincular a Alperovich (h) y a Kaleñuk
respecto del encubrimiento de la investigación del crimen de Paulina Lebbos.
El expediente principal también está a un paso de
ser sometido a juicio. La acusación de López Ávila alcanza al ex jefe de
Policía, Hugo Raúl Sánchez; al ex subjefe de Policía, Luis Nicolás Barrera; al
ex subjefe de la Regional Norte, Héctor Rubén Brito; al ex secretario de
Seguridad, Eduardo Di Lella y al policía retirado Hugo Waldino Rodríguez.
Roberto Gómez, el único imputado en prisión preventiva, “cayó” porque habría
usado el celular de la víctima luego de que esta desapareciese.
LOS OTROS
FISCALES
ALEJANDRO
NOGUERA
Fue el primer fiscal que investigó el crimen de
Paulina Lebbos. Sin embargo, quedó apartado de la causa poco tiempo después, el
20 de abril de 2006. Ese día LA GACETA publicó una fotografía donde se lo veía
saliendo de la casa del entonces gobernador, José Alperovich, la noche
anterior.
DIEGO LÓPEZ
ÁVILA
En 2013, la Nación le encargó a Bernardo Lobo
Bugeau que revisara la causa. El informe final fue lapidario y, cuando se hizo
público, Albaca renunció. El caso pasó a manos de López Ávila, quien pidió que
los encargados de la seguridad de la Provincia fueran juzgados por el
encubrimiento del crimen.
Respuestas
para entender el caso
¿Cómo llegó la causa “Lebbos” a Albaca?
En marzo de 2006, la Corte lo designó para que
dirigiera la investigación luego de que separara a su par Alejandro Noguera de
la causa.
¿Cuánto tiempo investigó el caso?
Albaca estuvo al frente de la investigación poco
más de siete años. Fue desplazado en junio de 2013 luego de que Bernardo Lobo
Bugeau cuestionase su trabajo.
¿Logró avances en la causa?
Para esclarecer el caso, no. Pidió colaboración al
FBI y recurrió a imágenes satelitales, pero jamás consiguió ni siguió una pista
firme.
¿Nunca hizo nada por el expediente?
Lo único destacado fue haber enviado a juicio a los
policías de Raco por encubrimiento y por haber fraguado las actas del hallazgo
del cuerpo de Paulina.
¿Cómo se calificó su trabajo?
El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la
Nación, a través de un informe de Lobo Bugeau, dijo que tuvo una “morosidad
escandalosa”.
¿Qué pasó después?
Albaca fue acorralado por las denuncias penales y
los pedidos de destitución. Se jubiló en 2014, pero no pudo evitar ser
investigado por su labor en el caso.
¿Quién sale beneficiado con este fallo?
Alberto Lebbos sin lugar a dudas. Sumó una prueba
más de que existieron maniobras que impidieron el esclarecimiento del crimen de
su hija.
Fuente: http://www.lagaceta.com.ar/nota/673757/policiales/justicia-da-razon-lebbos-ordena-albaca-vaya-juicio-sus-actos-como-fiscal.html