Según datos de la Oficina de la Mujer
de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, el sistema de justicia está
conformado por un 56% de mujeres, pero la participación disminuye en puestos de
mayor jerarquía. En el total de las jurisdicciones Federales y Nacionales la
proporción de mujeres camaristas alcanzaba en 2019 un 25%; mientras que el
porcentaje de magistradas era de 31%.
Estos datos muestran los diversos
obstáculos que atraviesan las mujeres a la hora de concursar y acceder a cargos
de altos puestos. En este sentido, un grupo de organizaciones de la sociedad
civil observaron cinco concursos finalizados en diciembre pasado, en los que se
conformaron ternas exclusivamente masculinas.
Se trata de las ternas para los
concursos 366, 412, 413, 415 y 418, aprobadas en el último plenario del Consejo
de la Magistratura de la Nación. Las organizaciones señalaron que los listados
de candidatos fueron conformados “exclusivamente por varones en violación al
Reglamento del propio Consejo” que establece que debe haber al menos una mujer.
En dichos procesos de selección, las
mujeres postulantes alcanzaron la instancia de entrevista personal y en varios
de estos casos incluso forman parte de las listas complementarias, pero no
fueron incluidas en las ternas enviadas al Ejecutivo.
De este modo, la Asociación Civil por
la Igualdad y la Justicia (ACIJ), la Asociación por los Derechos Civiles (ADC),
Fundación Mujeres en Igualdad, Fundación para el Estudio e Investigación de la
Mujer (FEIM), Poder Ciudadano y Red Mujeres para la Justicia alertaron sobre
esta situación mediante notas enviadas al Consejo de la Magistratura, al Poder
Ejecutivo y a la Comisión de Justicia y Asuntos Penales del Senado.
“Esta brecha en el acceso igualitario
a la función pública en cargos de jerarquía, implica no sólo un incumplimiento
de obligaciones constitucionales en materia de derechos humanos, sino también
un perjuicio al funcionamiento y legitimidad del Poder Judicial, quien es el
encargado en última instancia de dirimir los conflictos sobre derechos del
conjunto de la sociedad, para lo cual debería reflejar la diversidad que habita
en ella”, sostuvieron.
En concreto, las entidades destacaron
la situación del concurso 366, para cubrir seis cargos de vocal en los
Tribunales Orales en lo Criminal Federal de La Plata, del cual se desprende que
en tres de las seis ternas propuestas no hay mujeres, lo cual, según explicaron
las entidades, se agrava teniendo en cuenta que en ninguna de las dos salas
actuales hay mujeres.
Las organizaciones firmantes
solicitaron que se revisen estas prácticas y que arbitren los medios necesarios
para “evitar que sean aprobados los pliegos procedentes -y otros- concursos que
hayan violado las obligaciones del Estado en materia de acceso igualitario de
las mujeres a los cargos judiciales”.
Mientras que en el concurso 412,
destinado a cubrir un cargo de vocal en la Sala II de la Cámara Nacional de
Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal de la Capital Federal, se
propone una terna de tres varones, a pesar de que en esta Cámara ya hay cuatro
camaristas varones sobre seis cargos posibles, por lo que pasarían a ser cinco
de seis.
A su vez, el concurso 413, destinado a
cubrir dos cargos de vocal en la Sala I de la Cámara Nacional de Apelaciones en
lo Civil y Comercial Federal de la Capital Federal, tiene una terna donde se
propone a una mujer y en la otra a ninguna, a pesar de que actualmente en
ninguna de las salas hay mujeres. En una situación similar se encuentra el
concurso 418, para cubrir tres cargos de vocal en la Cámara Nacional de
Apelaciones en lo Penal Económico, ya que en dos de las ternas propuestas no
hay ninguna mujer, a pesar de que en esta Cámara actualmente sólo hay una
mujer.
“El escenario muestra entonces un
marco de posibilidad realmente reducido para la elección de las postulantes
mujeres en condiciones de igualdad con sus pares varones”, añadieron.
Las organizaciones firmantes
solicitaron que se revisen estas prácticas y que arbitren los medios necesarios
para “evitar que sean aprobados los pliegos procedentes -y otros- concursos que
hayan violado las obligaciones del Estado en materia de acceso igualitario de
las mujeres a los cargos judiciales”.
Fuente: https://www.diariojudicial.com/nota/88220/noticias/techo-de-cristal-en-la-justicia.html